A continuación, te contamos qué hicimos, por qué lo hicimos así y cómo puedes prevenir que te ocurra lo mismo.
Fisuras longitudinales y microgrietas en la fachada, principalmente en juntas y encuentros (marcos de ventanas, dinteles, coronaciones).
Ingreso de agua de lluvia por capilaridad y por presión de viento.
Afectación interior: pintura soplada, eflorescencias, olor a humedad y yeso debilitado.
Implementamos un sistema de reparación flexible compuesto por tres elementos:
Sellador de silicón-poliuretano (SPU) de alto desempeño: combina gran adherencia, elasticidad y resistencia a la intemperie, ideal para fisuras activas (donde el muro “trabaja” con dilataciones y vibraciones).
Masillas elastoméricas: nivelan, corrigen porosidad y aportan memoria elástica para acompañar micro-movimientos sin volver a abrir la fisura.
Pintura acrílica exterior de calidad profesional: acabado impermeable y transpirable, resistente a rayos UV, que protege el sistema y homogeneiza el color de la fachada.
Inspección y diagnóstico
Identificamos el tipo de fisura (pasiva, activa, estructural), el ancho promedio y las zonas de mayor riesgo (encuentros y remates).
Preparación del sustrato
Apertura controlada de la fisura en “V” donde fue necesario.
Limpieza mecánica y aspirado para eliminar polvo, hongos y material suelto.
Corrección de pendientes y drenajes superficiales que favorecían el encharcamiento.
Imprimación (cuando aplica)
Aplicación de primer compatible en sustratos muy absorbentes para mejorar la adherencia del sistema.
Sellado elástico
Colocación del sellador de silicón-poliuretano mediante pistola, garantizando relleno total y anclaje a flancos.
Perfilado del cordón para obtener espesor y geometría adecuados (relación ancho/profundidad).
Regularización con masilla elastomérica
Relleno y alisado de poros y microfisuras contiguas. Este paso sella “puntos débiles” que suelen reactivarse con las lluvias.
Revestimiento y acabado
Sellador/acrílico base para uniformar absorciones.
Dos manos de pintura acrílica exterior, con tiempos de curado respetados.
Reintegración cromática para un acabado homogéneo.
Control de calidad
Ensayos puntuales de estanqueidad (cuando el entorno lo permite), revisión de juntas y emisión de recomendaciones de mantenimiento.
Elasticidad y durabilidad: el SPU y las masillas elastoméricas acompañan los movimientos del muro, evitando la reapertura de la fisura.
Impermeabilidad + transpirabilidad: la pintura acrílica de calidad bloquea el ingreso de agua de lluvia, permitiendo que el muro “respire” hacia el exterior.
Compatibilidad: materiales formulados para trabajar en conjunto y no desprenderse con el sol, la lluvia o los cambios de temperatura.
Acabado profesional: mejora estética inmediata y protección prolongada de la fachada e interiores.
Cese de filtraciones hacia ambientes interiores.
Desaparición progresiva del olor a humedad y reducción de eflorescencias.
Recuperación del acabado en paredes internas tras el secado y repinte.
Mayor vida útil de la fachada y menos gastos en reparaciones futuras.
Monitorea juntas, marcos y coronaciones: son zonas típicas de ingreso de agua.
Evita parches rígidos en fisuras activas: se agrietan otra vez.
Pinta con sistemas compatibles: no mezcles productos sin asesoría; podrías perder adherencia.
Programa mantenciones cada 18–24 meses: revisiones preventivas ahorran dinero y molestias.
Diagnóstico sin compromiso: Envíanos fotos por WhatsApp y te indicamos si tu caso requiere sellado elástico o reparación integral.
Visita técnica programada: Agenda una inspección para recibir un presupuesto claro y un plan de trabajo a tu medida.
Plan de mantenimiento anual: Te ayudamos a diseñar un cronograma preventivo para evitar que el problema regrese.
Actúa antes de la temporada de lluvias. Una intervención a tiempo evita daños mayores en pintura, yeso, muebles y cableado.
Contáctanos hoy presionando aquí.para una evaluación profesional y una propuesta transparente.
Te acompañamos de principio a fin: diagnóstico, reparación y garantía.